Abdominoplastia

Abdominoplastia o Cirugía de Abdomen

Es posible que el exceso de piel, o las estrías, no permitan lograr un buen resultado en el contorno del abdomen con una lipoescultura.
En estos casos es necesario retirar la piel sobrante y reforzar la pared abdominal para restaurar una adecuada silueta abdominal.

Este procedimiento se realiza bajo anestesia general o regional, con un promedio quirúrgico de dos horas. Es necesario el uso de una faja para lograr la adecuada adhererencia de la piel durante el periodo postoperatorio y de esta forma lograr el mejor resultado posible.

Este es un procedimiento a través del cual se retira el exceso de piel y de tejido graso acumulado en el área abdominal. Es posible combinarlo con otros procedimientos y en particular con la lipoescultura pare permitir un moldeamiento adecuado del cuerpo en un solo procedimiento quirúrgico. En general podríamos decir que el paciente con grasa en su abdomen y una piel que ha perdido su elasticidad, posiblemente con estrías y que tiende a descolgarse es un buen candidato para obtener un buen resultado con esta cirugía.

El procedimiento como tal normalmente se realiza bajo anestesia general, y consiste en realizar una incisión baja en el abdomen a través de la cual se “despega” la piel y la grasa del plano muscular hasta llegar a la altura de las costillas.
Teniendo el musculo expuesto se realiza una sutura (plicatura) para fortalecer la pared abdominal, y se procede a retirar el exceso de piel y grasa.
Se realiza la sutura con material absorbible y se termina reconstruyendo la cicatriz umbilical y posicionando un drenaje para evitar la acumulación de liquido debajo de la piel.

El tiempo aproximado del procedimiento puede variar entre dos y cuatro horas usualmente. El cuidado en casa requiere de deambulación precoz, uso de medias antiembolicas , medicamentos para evitar la formación de coagulos en las piernas y posiblemente la realización de masajes. Este periodo varía entre unos cinco a diez días.
Como todo procedimiento este no esta exento de riesgos, que incluyen desde dolor y formación de morados (equimosis) , alteraciones en la cicatrización, y algunos menos frecuentes que se discuten en cada caso en particular con el cirujano tratante.